Llevamos un tiempo trabajando las competencias que demandan las empresas y entrenando capacidades para aumentar nuestra empleabilidad. Es hora de poner en práctica todo lo trabajado hasta ahora ya que las intermediaciones nos abriran el camino para las entrevistas. Esta semana destacamos 2 de 4 puntos fundamentales en esta tarea:

1. Trabajo previo a la entrevista.

Antes de enfrentarnos a una entrevista de trabajo tenemos que hacer una pequeña labor de investigación. Internet es una buena herramienta porque las empresas vuelcan su información en ella. Analizar esta información de manera eficaz es importante, sobre todo cuando nosotros compartimos su misión, visión y valores. Hay que saber cúal es su labor, como la llevan a cabo y sobre todo que perspectivas tienen de futuro. En la mayoría de los procesos de selección los entrevistadores se interesan por tus conocimientos acerca de la empresa y puede ser un punto diferenciador respecto al resto de candidatos porque denota interés.

Del mismo modo adaptar el CV a la empresa es igualmente importante. Existen diferentes tipologías de CV y hay que saber adaptarlo a la demanda. Los cronológicos son interesantes cuando tú experiencia está ligada al puesto demandado y no hay vacíos temporales. Los cronológicos inversos potencian por otra parte los conocimientos y la formación. Los CV por competencias están a la orden del día ya que las aptitudes cada vez son más requeridas por las empresas. Esta tipología fortalece tus capacidades personales y profesionales, siendo muy útil para los candidatos con menos experiencia laboral.

2. Durante la entrevista.

Ante todo tener presente que las entrevistas no son una molestia para la empresa y los entrevistadores, sino que tienen muchas ganas de encontrar a la persona adecuada. Mantener la calma en una situación de presión es algo que se puede entrenar y es mejor llevarlo trabajado previamente. Para dar seguridad, como ya hemos mencionado en varias ocasiones, tener el "about me" interiorizado va a ser un plus diferenciador y nos va a ayudar a asumir y quitarnos el miedo. La técnica del anclaje también es un buen recurso para darnos seguridad. Para ello sólo es necesario un buen recuerdo del estado emocional que buscamos y un gesto al que lo puedas asociar. De esta manera facilitas a tu mente llegar a ese estado mental deseado. Todo esto nos ayuda a mantener la concentración, teniendo presente que debemos escuchar antes de preguntar, mostrar seguridad y lo más importante de todo, demostrar actitud e ilusión.

Continuará...