En una de las sesiones grupales de la Lanzadera nos atrevimos a jugar al tennis, el tenista fue el ordenador que nos lanzaba una imagen muy potente y una frase, ante esta y el espacio dividido en dos partes (SI estamos de acuerdo, NO estamos de acuerdo), las pelotas, participantes de la Lanzadera, oscilarán a uno u otro lado en función de sus creencias.

Este partido de tennis ha tenido un objetivo muy concreto y ha sido incidir que para cambiar hay que querer hacerlo y quién puede hacerlo somos Nosotros.