Los miembros de la Lanzadera Km.0 de Madrid-Retiro recordaremos el día de ayer por la ocasión que tuvimos de demostrar el valor de la solidaridad que conforma este equipo, no solo entre nosotros mismos, sino con personas ajenas a él. En un evento solidario organizado en el Centro de Rehabilitación CRL, compartimos parte de las herramientas y conocimientos relacionados con la búsqueda de empleo con pacientes y empleados de la institución. En total, más de 100 personas que acudieron al Salón de Actos de la Casa Provincial de las Hermanas Hospitalarias.
Para algunos de nosotros fue una gran prueba de superación y una forma de enfrentarnos a determinados miedos a hablar ante un público concurrido. Sin embargo, era la oportunidad perfecta para que personas que también necesitan mejorar su empleabilidad y que no han podido disfrutar de las ventajas de nuestro proyecto se beneficiaran de ello. Filosofía “JobStorming”, al fin y al cabo.
El evento consistió en cuatro talleres basados en algunos de los aspectos más importantes que hemos tratado en la Lanzadera. Nuestro coordinador Javier Cortecero dio el pistoletazo de salida con una gran charla de marca personal que consiguió enganchar a los asistentes de principio a fin. Se nota que si se hace con entusiasmo y sabiendo del tema, hablar de cómo venderse siempre llama la atención, lo digamos nosotros o los que mejor lo han hecho a lo largo de la historia.
A continuación, nuestra compañera Beatriz llevó ese concepto a la práctica contándonos cómo cuidar nuestra imagen y proyectarla a través de las redes sociales. Es decir, puso los cimientos de cómo conseguir una entrevista de trabajo porque, tal y como nos aseguró en su intervención, casi un tercio de los empleadores rechazan a candidatos por su reputación digital.
Posteriormente, Marga, diseñadora estrella del equipo en el entorno CANVA, deleitó a los presentes con una masterclass sobre cómo elaborar un currículum creativo a través de esta herramienta de diseño online para no diseñadores que, según señalaron muchos de los asistentes en la sala a la postre, ha sido todo un descubrimiento. Gracias a ella, los miembros de la Lanzadera ya descubrimos en su momento que hay posibilidad de ser creativos gráficos sin necesidad ser un experto en Photoshop. En esta ocasión, fueron los usuarios de CRL los que lo hacían y, no nos cabe duda por sus agradecimientos, desde hoy va a haber unos cuantos currículums creativos hechos por CANVA asediando a responsables de RR.HH.
ENSEÑANDO A SEDUCIR AL EMPLEADOR
Tras un breve descanso, llegó la hora de mostrar cómo venderse de verdad de cara al empleador. Carmen inició esta segunda parte mostrándonos cómo hacer un buen Elevator Pitch, una técnica con la que poder conseguir captar la atención de un empleador en cualquier situación espontánea. La idea de poder contar en apenas un minuto lo capacitados que estamos para desempeñar un puesto de trabajo empujó a algunos a querer saber un poco más sobre el tema y sobre su forma de llevarlo a cabo.
Como broche final, nuestros compañeros Ángel y Carlos fueron los encargados de desmenuzar las claves para abordar con garantías y seguridad una entrevista de trabajo; cómo prepararlas, cómo comportarse en ellas, el autoconocimiento previo que debemos tener para saber explicar nuestras fortalezas y debilidades. Nada quedó en el olvido e, incluso, hubo tiempo para hacer un roleplay con un voluntario entre el público, que se prestó a hacer de candidato en una entrevista simulada.
El evento estuvo amenizado en todo momento por Rubén, que, entre taller y taller, aderezó el evento con pequeñas píldoras informativas sobre la Lanzadera. Era la primera vez que exponíamos nuestra filosofía JobStorming ante tanta gente y, pese a los nervios iniciales, en cuanto entramos en materia acabamos sintiéndonos cómodos gracias a la gran acogida y entusiasmo del público, que participó muy activamente en cada taller, y entre el cual contamos con la presencia de integrantes de la Lanzadera de Alcalá. Siempre es un lujo saber que hay parte de la Familia en algún lado del patio de butacas.
En resumen, una grata experiencia que comprime nuestra andadura desde que pisamos por primera vez “Km.0” y que nos reconforta, al saber que hoy hay personas que saben un poco más sobre cómo desenvolverse en el mercado laboral. Gracias, una vez más, al Centro CRL por darnos tal oportunidad.
