Hoy nos hemos ido hasta la ludoteca soriana Aprendix. Nos ha recibido Carlos, responsable y propietario de la misma. Bueno, Carlos y las sonrisas de las niñas que allí estaban disfrutando del servicio de "guardería" y de Oliver. 

Primeramente nos ha contado cómo le surgió la idea de iniciar una ludoteca de carácter privado en Soria. Cansado de su anterior experiencia laboral decidió iniciar algo por su cuenta para poderse quedar en Soria. Este geógrafo de formación tenía claro que lo que le gustaba era la docencia, pero había demiasiadas academias ya en Soria y decidió, tomando como referencia centros similares de otros lugares como Logroño, compaginar el apoyo escolar con otras actividades y comenzar con esta aventura en forma de ludoteca. 

A pesar de no haber cumplido el año de actividad ha sabido adaptar sus servicios a las peticiones de los clientes. Principalmente son padres y madres de niños y niñas que aún no tienen edad para ir al colegio, o que simplemente necesitan tener unas horas más de cuidado por motivos laborales. El servicio de guardería y de canguro (recogida de los peques) son los más demandados, pero también realizan talleres y actividades para niños más mayores durante las tardes. Talleres, apoyo escolar, deportes "de interior", actividades al aire libre en verano o celebración de cumpleaños con animación, entre otras. 
Sabiendo de la importancia de ser flexible en cuanto a servicios se refiere y de saberse adaptar, Carlos tratar de contar con gente que tenga un perfil complementario al suyo. Aprecia la formación en magisterio infantil, pues dice que se notan las tablas, y siempre trata de tener un guiño en forma de contrato hacia las personas que hacen prácticas en su centro por las horas que trabajan allí sin cobrar, aunque no siempre se puede. 

Ha prestado interés hacia nuestro proyecto y hacia los perfiles de nuestros lanzaderos interesados en trabajar allí y ha quedado a nuestra disposición para lo que necesitemos. Además de su amabilidad hemos podido comprobar su mano con los peques y la ilusión que tiene hacia su proyecto, al que mima y trata de mejorar día a día, cuidando siempre al máximo la seguridad, la limpieza y el entetenimiento de sus mini usuarios, que a pesar de ser minis no son menos exigentes. 
Muchas gracias por abrirnos las puertas y poder disfrutar de las sonrisas de los más pequeños.