Mi vida ya está encauzada y este es mi momento para poder dedicarme de lleno como Cooperante en los campamentos de refugiados saharauis. Los viajes son costosos y me hace tener que buscar un trabajo remunerado y, como dijo Confucio,

 “Escoge un trabajo que te guste, y nunca tendrás que trabajar, ni un solo día de tu vida”

Soy curiosa, inquieta, emprendedora y activa, mi vida laboral ha transcurrido en la Atención al cliente, y con esa experiencia me gustaría poder dedicarme a los servicios de proximidad para las personas. Veo la necesidad de atender a nuestros mayores, darles calidad de vida, atender sus necesidades, demostrarles que son válidos, potenciar sus valores y aprender de sus experiencias. Intercambiar conocimientos adaptándonos ambos.

Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma. (Nelson Mandela)