Visita a Ambra Llibres

Esta mañana hemos visitado Ambra LLibres, librería de referencia de La Safor, ubicada en Gandía, que mantiene la calidad de la oferta literaria y que, sin perder el carácter tradicional, se adapta al nuevo mercado, teniendo en consideración las nuevas tecnologías y las necesidades de los lectores. 

 

Nos ha atendido María Bravo Cortés, gerente de la librería, que ha tenido la amabilidad de describirnos el funcionamiento del establecimiento, las distintas formas de entrada de libros, las diversas tareas de sus compañeras, entre otros aspectos.

 

Además de la gestión propia de la tienda, están llevando a cabo actividades culturales para fomentar la lectura, tanto en la población infantil y juvenil como en la adulta. Por ejemplo, reciben visitas de los colegios, permitiendo que los niños tengan un contacto mucho más directo con los libros. Asimismo, colaboran con algunos medios de comunicación, hacen uso de las redes sociales, realizan sorteos de libros firmados por autores o autoras… Son muchas otras opciones que están contemplando y que, por ello, convierten este maravilloso espacio, aparentemente estático, en uno dinámico (“vivo”). 

 

Por otro lado, nos ha comentado que no se requieren estudios concretos para poder formar parte de la librería, más bien, es necesario disponer de un bagaje cultural amplio, ya que es así como se consigue dar un trato al cliente más personalizado. Al fin y al cabo, es la única forma de poder ofrecer “ese” libro que el lector, muchas veces, ni siquiera reconoce lo que realmente busca o desea leer. Por tanto, trabajar con libros y personas, supone seguir leyendo y aprendiendo de forma continua o, en otras palabras, implica sentir interés y gusto por la lectura.

 

Para acabar, decir que nos ha fascinado todo lo que hemos descubierto dentro de las cuatro paredes que contienen la magia de tantos creadores y creadoras de historias que esperan ser encontradas con sus lectores. Como bien se comenta en la página web de la librería, la lectura supone elección y libertad, pues leemos lo que sentimos en determinados momentos de nuestras vidas y, a través de la lectura, rompemos muchas barreras. 

 

Agradecemos a María Bravo su tiempo y dedicación, y la cercanía con la cual nos ha recibido, haciéndonos partícipes de su pequeño segundo hogar.