Hemos tenido la oportunidad de organizar un Taller de Emprendimiento desde la Lanzadera Madrid Retiro. Ha tenido una estupenda acogida por parte de todos los participantes porque ha conseguido cubrir conocimientos y herramientas imprescindibles para el desarrollo de proyectos propios, hecho que era una demanda por nuestra parte.
Los ponentes de este taller, Isabel Martínez y Enrique Roibás, han conseguido que asentemos conocimientos de forma amena y activa sobre cómo generar ideas viables desde el punto de vista empresarial, y apuntar algunas estrategias de financiación.
Realizamos una dinámica de equipo orientada a generar ideas de negocio, partiendo de problemas que quisiéramos resolver. Posteriormente analizamos cuáles eran las oportunidades y amenazas que podían condicionar nuestro enfoque. Nos dividimos en dos grupos donde, gracias al entrenamiento que durante estos meses hemos tenido en la Lanzadera, pudimos poner en práctica nuestras habilidades y competencias, y aportamos soluciones muy interesantes. Después nos trasladaron la importancia de hacer un análisis con el modelo Canvas, una matriz sencilla y muy completa, fundamental para reflexionar y plasmar los aspectos clave a la hora de desarrollar un negocio, poniendo el foco en el desarrollo de la propuesta de valor de la empresa. Esta herramienta es esencial tanto para nosotros mismos como para usarla como herramienta de comunicación para cualquier persona que quiera intervenir en la empresa.
Tras el necesario networking durante el café, llegó la emoción de una historia real de emprendimiento con María José Esteban, que nos hizo reflexionar sobre la necesidad de analizar la escalabilidad de nuestro negocio en fases iniciales para luego no llevarnos sorpresas, ya que es fácil pasar de un emprendimiento a un modelo más ambicioso sin darte cuenta. Con ella aprendimos también las diferencias entre el autoempleo del emprendimiento. Lo más valioso de la aportación de María José Esteban: nos invitó a definir lo que sabemos hacer bien, mejor que otros, o al menos tan bien como los mejores, para volver a incidir en la propuesta de valor como la idea central de su presentación.
Paola P. Cortijo nos habló de la importancia tener clara la misión y el propósito, por qué emprendemos y de la necesidad de tener un Plan B. También insistió en lo conveniente de creer en ti mismo, de no tirar la toalla ante el fracaso y reemprender cuando fuera necesario, emprender con sentido, con consciencia y con aportación de valor.Y de nuevo, emprender con sentido, con consciencia y con aportación de valor.
A modo de resumen, podemos concluir con una reflexión en la que coincidieron todos los colaboradores del taller: LOS PROYECTOS SON PROYECTOS VIVOS y tenemos que adaptarnos y evolucionar con ellos.
Agradecer a nuestros compañeros María José Racionero, Ana de Miguel y R. Oliver que compartieron su idea de emprendimiento sobre sus distintos proyectos.
Terminamos con un coloquio entre ponentes y participantes donde llegamos a algunas conclusiones, y una de las más emocionantes fue pensar en nuestro proyecto como en un hijo, puesto que somos responsables de hacerlo crecer con compromiso, responsabilidad y, sobre todo, que es para toda la vida.
