El miércoles 22 de febrero recibimos la visita de Miguel Ángel García (docente en la Universidad Carlos III de Madrid y voluntario de la Fundación Telefónica), que vino a hablarnos de las competencias y su identificación e importancia.

Comenzando su exposición hizo un paralelismo entre conocimientos/aptitutes (relacionado con lo aprendido) y las competencias/actitudes (relativo a la forma de ser).

Al ser entrevistados en un proceso de reclutación de nuevos empleados, nos analizan más de lo que a simple vista cabría pensar; podemos compartir aspecto, conocimientos y trayectoria con el resto de candidatos, pero son las competencias diferenciales las causantes de que se decacanten por uno en  particular (el feeling causado resulta crucial).

Cada persona desarrolla unas competncias concretas, y hemos de asumir la no-excelencia en todas ellas porque no existe nadie que las posea. Todos tenemos nuestros puntos fuertes y débiles. A todos nos falla y falta algo.

Compartió con nosotros un esbozode lo que se prevée sea el trabajador de 2020 y, a las consabidas competencias clásicas (compromiso, responsabilidad...) y de los tiempos que corren (redes sociales, informática básica), se añaden los valores sociales: voluntariado, comedores sociales, pertenencia a una ONG, etc.

Quiso hacernos ver que el entusiasmo al desempeñar nuestro trabajo juega un papel muy importante, y lo ilustró con un ejemplo: había dos hombres empujando piedras pesadas y, al ser preguntados qué hacían, uno contestó con tedio que "moviendo pedruscos" mientras que el otro, derrochando exaltación y felicidad, respondió que "construyendo una catedral". ¡Todo depende de cómo veamos las cosas!