Dinámica: Carta a la cebolla

 

            De regreso al aula, luego de un día festivo con mucha relevancia en materia de las reivindicaciones laborales y sociales, seguimos en la búsqueda continua de ofertas laborales que nos permitan un empleo estable y digno. Retomando las actividades pendientes, podemos decir que nuestros proyectos avanzan con muy buenos resultados. Tenemos muy buenas noticias: ¡Nuestra compañera Iris ha conseguido empleo! Su inserción laboral es un hecho, la echaremos de menos en la Lanzadera, estamos muy felices por ella y su tan merecido logro. 

            ¿Le escribirías una carta a una cebolla? Si, como lo has leído, ¡Una cebolla! La dinámica de hoy ha consistido en redactar una carta a una cebolla, la cual podía ser de estilo formal, oficial, humorística, romántica, de amistad, etc. Todos nos estábamos preguntando cual era el objetivo y el aprendizaje que obtendríamos. Una vez redactada nuestra carta a tan singular destinataria, hemos escrito una carta de respuesta desde la perspectiva de la cebolla. Todo un pequeño reto, superado con un sobresaliente por varios de nuestros integrantes.

¿El resultado? Unas cartas con mucho sentimiento y muy buena narrativa, dignas de un novel autor. ¿El aprendizaje? La empatía, una de las competencias más importantes incluidas en la inteligencia emocional. Debemos aprender a desarrollarla, ya que es una habilidad social clave que nos permitirá una mejor comunicación a la hora de enfrentar situaciones en las cuales, debemos colocarnos en el lugar de nuestro interlocutor y tratar de entender su posicionamiento. Ser más empáticos nos abrirá muchas puertas y alguna ventana.