Iniciamos una semana con muchas ganas de aprender, y lo primero que hicimos hoy fue seguir estrechando lazos para generar confianza y crear un ambiente confortable. ¿La mejor manera de iniciar la jornada? ¡Una dinámica! Tenemos la ventaja de encontrarnos realizando esta lanzadera en un espacio físico con unas increíbles áreas verdes, lo que nos permite realizar ciertas actividades en el exterior, aire puro y aprendizaje, una mezcla exitosa.

            La actividad desarrollada fue “Bote salvavidas”, un barco se hunde (nosotros escogimos el Titanic), hay un número determinado de pasajeros y un número reducido de botes salvavidas, a la voz del capitán (nuestra técnica) se sabe cuántos pasajeros por bote debe haber y cuantos botes hay en existencia. La idea era que formáramos grupos, abordáramos las barcas en número indicado y evitar que algún compañero quedara fuera del bote. De pasarse o faltar pasajeros, el bote se declaraba hundido. Fue un ejercicio muy estimulante, donde mostramos  espiritu de cooperación.