"Y llegó el momento de decir adios"

“Cinco minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo”. Ya lo dijo Mario Benedetti. Y es que cinco meses pasan demasiado rápido. Qué lejos queda ya aquel 22 de marzo en el que un grupo de veinte personas, aún desconocidas, llegamos a esta Lanzadera con una misma ilusión: encontrar el trabajo deseado.

 
Ahí nos esperaba Lola García, nuestra técnico. Gracias a sus talleres hemos sido capaces de fortalecer, o incluso de descubrir, habilidades y conocimientos que, o bien no los teníamos o estaban durmientes en nosotros. Con ella hemos reido y llorado. En definitiva, ha sido como una madre en esta gran familia que hemos formado.
 
Juntos hemos aprendido que el desempleo en equipo es mucho más llevadero y constructivo. Estamos orgullosos de poder decir que, al final de este programa, somos (o hemos sido) parados activos. Como resultado, muchos de nuestros compañeros han logrado encontrar lo que buscaban, otros hemos encauzado nuestro camino, que no es poco.
 
El simple hecho de llevar una rutina, de llevar un orden, de aprender a trabajar en equipo con otras personas, de intentar llegar a una puesta en común, de entenderse, a veces imposible, todo eso nos ha hecho ser quienes somos ahora. Porque las personas de ahora no somos, ni mucho menos, parte de la sombra de lo que éramos al principio.
 
Cinco meses dan para mucho, y, aunque tengamos la sensación de que se ha pasado rápido, agradecemos todo lo que nos han dado, todas las oportunidades que nos han ofrecido. Todas las puertas que nos han abierto, y las que nos han cerrado también. De cualquier paso se aprende y aquí hemos llegado a manejar mil y una emociones distintas en un tiempo récord. Se podría decir que estamos encaminados a ser las personas que siempre hemos deseado, porque esto es sólo el principio, y miramos al futuro con optimismo y entusiasmo.
 
Queremos agradecer a los patrocinadores del programa, sin ellos, esta aventura no habría sido posible. Gracias a Fundación Telefónica, Fundación Santa María la Real, Fondo Social Europeo, y finalmente, SEF.
Y de un modo especial a la Agencia de Desarrollo Local del Ayuntamiento de Murcia por la cesión de las instalaciones donde hemos llevado a cabo a lo largo de estos meses toda nuestra actividad.
 
Antes de poner el broche de oro al blog de esta Lanzadera, me vais a permitir una licencia. Quiero dar las gracias a dos personas que me han ayudado muchísimo a la hora de llevar hasta el final la redacción de los artículos, y esas no son otras que mis dos compañeras, con las que he compartido días de trabajo: Sara Zamora López e Inés Martínez Carrasco. Desde el primer día me han estado ayudando en todo momento, tanto en los buenos como en los malos, en los que uno no se encuentra del todo bien. Ese cariño y compañerismo lo llevaré siempre en mi corazón. Con vuestra ayuda he aprendido que soy capaz de escribir todo lo que me proponga. Sois maravillosas.
 

Llegó el momento de decir adiós a estos cinco meses. Aunque este círculo se cierre y se ponga fin a esta aventura, ante nuestros ojos se abre una nueva etapa en la que podemos conseguir todo aquello que nos propongamos ¿Por qué no?.

 

Informan: Sara Zamora López, Rubén López Fernández e Inés Martínez Carrasco

Imagen: Facebook