¡Hasta siempre, compañer@s!

¡Muy buenas, compañeros/as!

 

Como reza el dicho popular, todo lo bueno termina por concluir. Hoy ha llegado el momento de decir adiós a la Lanzadera de Empleo de Avilés 2018 y, por supuesto, de hacer balance de estos cinco meses de intensa actividad.

 

Son varios los compañeros que, llegados a este punto, se han insertado ya en el mercado laboral. Pero que no os quepa la menor duda de que los demás seguiremos luchando hasta conseguirlo; y sabemos que será más pronto que tarde.

 

Puede que, como en la analogía de la rana hervida, salvando mucho las distancias, los cambios hayan sido progresivos en nosotros, y que incluso de algunos de ellos no nos demos cuenta hasta que nos enfrentemos de forma individual a la búsqueda de empleo. Sin embargo, la evolución ha sido innegable.  

 

Como participantes nos consideramos unos afortunados, ya que hemos podido acercarnos y conocer a empresas de nuestros respectivos sectores a las que, de otro, nos habría sido más difícil acceder.

 

Y ya, desde la perspectiva personal, nos llevamos, valga la redundancia, a las personas. A todos los compañeros que día a día, o tarde a tarde, hemos estado al pie del cañón trabajando. Con todo, también ha habido lugar para la diversión y para conocernos más allá de la búsqueda de empleo. En ocasiones, incluso, hemos llegado a forjar hermosas amistades..

 

Desde luego, si a día de hoy tuviésemos que definir esta experiencia en pocas palabras, ésas serían “punto de inflexión”. Ha habido un antes y un después para nosotros en la búsqueda de empleo; ahora tenemos la fórmula, tenemos el objetivo. Sólo necesitamos tiempo. Es como si fuésemos cocineros: ya tenemos los ingredientes y la receta; ahora sólo hay que mezclarlos y cocinarlos. El resultado de la receta será un empleo.

 

¡Gracias por todo lo vivido! Y recordad: queremos, valemos y… ¡Acción!