La mente, para mí, el mayor poder del ser humano, con ella podemos generar oscuridad o brillo en la vida de las personas. Y si juntamos la mente con el poder de los sentimientos tenemos la mezcla perfecta para conseguir un desarrollo pleno.

Esa es mi pasión, conocer, aprender, crecer como persona gracias a todas las personas que pasan por mi vida, tanto a nivel profesional como a nivel personal.

Me diplomé en Educación Primaria en la UGR pero siempre sentía que me faltaba algo para poder desarrollarme plenamente en mi profesión y por eso realicé la licenciatura de Psicopedagogía. La cual me doto de la posibilidad de trabajar con grandes profesionales de los que he ido y sigo aprendiendo día a día y de conocer personas que han influido positivamente en mi vida.

Desarrollándome en lugares increíbles como el Ave María en el Varadero de Motril, la asociación Proyecto Hombre donde me brindaron la posibilidad de ejercer de terapeuta y de prevención con familias con adolescentes; y, de trabajar con un gran grupo de orientadoras en mi desempeño en el colegio San Agustín de Motril.

“Pocos sospechan al percibir la primera fisura en una pieza de porcelana que esa delgada línea basta para hacerla estallar”. Nuria Barrios