Construccion del EQUIPO II. Taller LEGO

Según la Wikipedia, estigmergia significa colaboración a través del medio físico. Pierre-Paul Grassé, un biólogo francés, fue el primero en incluirlo para explicar cómo las hormigas lograban realizar las tareas de manera conjunta sin necesidad de una planificación ni de un poder central que las dirija.
Nosotros vamos a aplicarlo a la formación y la constitución del equipo. 
El técnico nos explica el procedimiento a seguir: debemos escribir cinco valores cada uno en post-it de colores. Después los colocaremos rodeando una mesa alrededor de la cual nos desplazaremos, colocando en el centro los que queremos que prevalezcan. En total en el centro de la mesa sólo pueden quedar cinco de esos valores. La norma más importante es que NO SE PUEDE HABLAR. Cada componente tiene la posibilidad de un número determinado de acciones y los valores con más de tres cambios quedarán fijados en el centro. Al final de la dinámica  quedan sobre la mesa: Éxito, Gratitud, Respeto, Tolerancia y Trabajo en Equipo.
 
 
Ahora sentaremos las bases del mismo por escrito y de manera consensuada. El proceso se basa en un lanzamiento de ideas por parte de cada uno de las cuales elegiremos las más votadas.
Los inicios nunca fueron fáciles, pero ésta va a ser la excepción. La elección de las señas de identidad del equipo, la foto y el lema surge de manera bastante fluida y conjuntada. La comunicación entre nosotros es buena y el consenso es rápido. Algo similar nos ocurre con las razones para la creación del equipo.
 
En este momento hacemos un paréntesis en la concreción de nuestros fines por escrito realizando un taller de lo más curioso: vamos a exponer nuestro sueño mediante el empleo de piezas de LEGO. Cada uno debe construir su futuro con ellas y, hay que reconocer que el resultado es muy variopinto. Desde abstracciones de construcción ambigua, hasta representaciones de escenas con un nivel de detalle muy alto. Hemos pasado un muy buen rato y hemos plasmado nuestra visión de futuro/deseo de una manera que nunca se nos habría ocurrido.
Después retomamos el escrito de constitución señalando los objetivos y las capacidades que necesitaremos para alcanzarlos.
 
 
 
“Nuestro problema no es encontrar mejores valores, sino ser fieles a aquellos que profesamos” (John W. Gardner)