El broche final de la Lanzadera de Antequera.

En primer lugar agradecer a la Fundación Telefónica, a Santa María la Real y al Ayuntamiento de Antequera la iniciativa de las Lanzaderas de Empleo, porque promueven la actividad laboral y además pone a un grupo de personas en búsqueda activa de empleo.

La etapa de la Lanzadera de empleo nos ha ayudado a crecer como personas y profesionalmente a todos los participantes, desde lo más básico,  por ejemplo cómo iniciar la búsqueda activa de empleo, hasta la digitalización de la misma. Hayamos o no conseguido trabajo; nos ha aportado conocimientos sobre el mundo laboral, a matizar un objetivo profesional,  tener un autoconocimiento perfecto de nosotros mismos, saber lo que queremos y como lo queremos. En definitiva encontrar nuestro camino, que en ese momento lo teníamos perdido.

Nuestra Lanzadera de Antequera, ha sido una Lanzadera difícil y dura, porque éramos personas muy diferentes aunque con un mismo objetivo. Hemos pasado por etapas de negatividad, estrés, dudas, incertidumbre, inseguridad… y un largo etcétera. Pero con las diferentes dinámicas, trabajo en equipo y actividades al aire libre hemos ido eliminando esos miedos que no nos dejaban ver más allá. Gracias por supuesto a Rocío, que decir de nuestra coordinadora, bueno fantástica, es poco para todo lo que ha tenido que soportar, porque está Lanzadera ha tenido muchos altibajos y gracias a su voluntad y  su profesionalidad como coordinadora del proyecto, nos ha sabido guiar en todo momento a cada uno de nosotros para poder superar esos momentos de negatividad e incertidumbre. 

 A lo largo de la etapa de la Lanzadera algunos de los participantes nos han ido dejando, o bien porque han encontrado un trabajo o porque no han querido seguir en la misma. Pero los que hemos terminado en la Lanzadera hasta encontrar el objetivo que queríamos, hemos trabajado duro para seguir el ritmo que se nos había marcado, y ha merecido la pena.  Porque gracias ha estos meses de intenso trabajo, nunca mejor dicho, hemos alcanzado el objetivo que deseábamos o incluso hemos alcanzado un objetivo que no estaba en nuestros planes cuando comenzamos en la Lanzadera.

A mí me ha tocado escribir el final de la Lanzadera, y es para mí un placer escribir estas letras, mientras escribo estas palabras mis ojos se llenan de lágrimas… Personalmente para mí la Lanzadera de Empleo ha marcado un antes y un después en mi vida. Gracias a este proyecto soy mejor persona, mejor madre y mejor mujer. He aprendido a valorar los pequeños detalles, ha hecho que mi mente se abra y vea más allá del horizonte, que cada mañana me levante con energía, viviendo cada momento como si fuera único y dándole importancia a lo que realmente tiene.

Rocío, pasará por muchas más Lanzaderas de empleo (espero que no la dejen escapar porque es una profesional como la copa de un pino) y conocerá a muchas más personas, pero los participantes de la Lanzadera de Antequera no te podremos olvidar tan fácilmente porque has marcado un antes y un después en nuestras vidas.

Esta experiencia es una de las etapas, de muchas que he tenido y tendré, de las más bonitas de mi vida, jamás pensé que un grupo de veinte personas y una coordinadora, me hicieran plantearme tantas cosas como persona y como profesional.  Cada vez que me caiga recordaré está etapa de mi vida para levantarme más fuerte y con más ganas de seguir hacia delante en el camino. Gracias a tod@s por darme un granito de arena para llenar mi playa y teneros para toda la vida.