La Rae recoge como quinta acepción de #etiqueta la calificación estereotipada y simplificadora. En el mundo de internet aparecen las etiquetas o hashtag como las palabras claves que se pueden clicar. Hay veces que ir de etiqueta puede ser peligroso. Se hizo una práctica por la cual debíamos o deberíamos adivinar la etiqueta que nos habían asignado desde el punto de vista de los demás. Utilizando alusiones, de forma indirecta. Cómo nos ven cuando estamos etiquetados y la posibilidad de percibirlo.

     La psicóloga del Centro de la Mujer de Manzanares Ángeles Morales partió del siguiente planteamiento en su tercera sesión sobre la autoestima: ¿Por qué nos sentimos bien? En nuestro intento por resumir las sesiones, vamos por el último tercio. Ligero de conocimientos en psicología, pido árnica por las críticas que pueda recibir.

     Debido a la cantidad de situaciones variables se generan una serie de pensamientos y emociones que no pueden entenderse por separado. Conocimiento y conducta. Nuestro pensamiento y nuestro comportamiento producirán unos sentimientos sobre esas emociones. El sentimiento será la forma de evaluar o procesar la reacción que produce la emoción. Sería una espiral de situación, pensamiento, emoción, comportamiento y sentimiento.

     Las ideas positivas que tengamos sobre uno mismo crean unas expectativas positivas. Nuestra conducta será efectiva y decidida. Y mi autoestima aumentará. Se retroalimentará.

    En sentido contrario, ideas negativas, también se retroalimentarán, será limitadoras a quien las tengan y con carencias.  

     Influye el sistema de creencias. Cambia por la forma de afrontamiento y las variables que cambien la situación.  Al cambiar el comportamiento se generan situaciones nuevas. La base está en los pensamientos. Las creencias producen distorsiones en el conocimiento. Los errores en pensamiento nos producen visiones borrosas.

     Podemos caer también en el error del adivino por el que no se cumplen las expectativas creadas, es un error del pensamiento. También podemos caer en la abstracción selectiva por la que maximicemos los aspectos negativos y minimicemos los positivos. O caer en visiones catastrofistas, o en valoraciones de injusticia en lo que no nos beneficia. Magnificar o minimizar. Otras distorsiones son la magnificación o minimización o las recomendaciones rígidas como deberías, siempre, nadie, y si…

     Estas distorsiones se trabajan reconociéndolas, cuestionándolas buscando evidencias, ver sí es útil, ver la intensidad de la emoción, ver si estoy cometiendo algún error de pensamiento.

     Buscar un pensamiento alternativo. Hacer experimentos conductuales que verifiquen si mi pensamiento alternativo se adecúa a la realidad. Todas las decisiones tienen consecuencias.

     “Necesitamos una nueva forma de pensar para resolver los problemas causados por el viejo modo de pensar” Albert Einstein. Lo malo es caer en la teoría política lampedusiana: que las cosas cambien para seguir igual. Se puede caer en la indefensión aprendida: hagas lo que hagas no vas a cambiar nada. Se caería en una zona de confort. Es necesario salir de esa zona.

     Las claves para el desarrollo de nuestra autoestima son:

     El autoconocimiento: tiempo propio o personal, para conocerme. Identificar mis pensamientos, creencias, necesidades, formas de comportamiento, afectos, sentimientos y miedos, cualidades y habilidades. "Conócete a ti mismo" decía en el templo de Delfos cuando se solicitaba el oráculo.

      Y descubrir nuestra singularidad Todos somos especiales. Algo que no es nadie más. Que se convierta en un autorefuerzo al reconocer cosas positivas. Aprendizaje.

     Ajustar a la realidad, aceptar errores, combatir la voz acusadora y la exposición a estímulos negativos mediante un diálogo interno controlado y positivo. Aceptación propia.

     En cuanto a los sentimientos/emociones, reprimirlos es insano. Se podría caer en la anhedonia y en la ataraxia. O en la incapacidad para expresarlo.

    Hay que asumir responsabilidades. Afrontar la situación con responsabilidad. Un cambio de actitud lo cambia todo.

    Las relaciones pueden ser sanas e insanas. Para la autoestima es básico tener relaciones sanas. Que permitan satisfacer nuestras necesidades básicas y adquirir conciencia de nuestros límites personales. Los límites insanos son mi espacio, tu espacio cuando se intervienen o entran en colisión produciendo una invasión del espacio personal. Los límites sanos tienen los espacios de cada uno independientes.

     Finalmente, el triángulo de la salud (físico, mental, y social) debe ser equilibrado como un triángulo equilátero.

     Agradecemos las sesiones realizadas por Ángeles Morales.

    Blas Maeso Ruiz-Escribano.

    Comunicación.